sentir que te muerdo,
mirarme hasta quemarme...
Jugar con mi pelo es
jugar con fuego...Agarrarme de la camisa y
no dejar que me vaya esta noche,
hacerme prisionero de tus sabanas,
tu plan maestro se ejecuta sin problema,
pues mi resistencia es solo fingida...
Dormiré a tu lado toda la noche,
no habrá resquicio ni recoveco entre nuestras almas
por el que pueda colarse el anhelo de tus noches solitarias.
No me prepares café por la mañana,
quédate conmigo, dame un beso con cara de dormida,
y dime que bien huele mi cama contigo dentro.
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